Que el Mensajero de Al-láh -que la paz y las bendiciones de Al-láh sean con él- solía refugiarse contra los genios, y del mal de ojos de los humanos.

Que el Mensajero de Al-láh -que la paz y las bendiciones de Al-láh sean con él- solía refugiarse contra los genios, y del mal de ojos de los humanos.

Se transmitió de Abu Saíd Al Judrí -que Al-láh esté complacido con él- que dijo: “El Mensajero de Al-láh -que la paz y las bendiciones de Al-láh sean con él- solía refugiarse contra los genios y el mal de ojo de los hombres hasta que fueron reveladas las dos últimas suras del Corán, recitándolas solas para tal fin sin añadir nada con ellas.

[Hadiz auténtico (sahih)] [Registrado por Ibn Mayah - Registrado por Al-Tirmidhi - Registrado por An-nsaa'i]

الشرح

Este hadiz muestra que el mensajero de Al-láh -que la paz y las bendiciones de Al-láh sean con él- solía refugiarse en Al-láh- Enaltecido sea- del mal de los genios, del mal de ojos de los envidiosos mediante las súplicas y los recordatorios al decir: me refugio en Al-láh de los genios y del mal de ojos, hasta que se revelaron los capítulos de "Al Falaq" y "An-Nas", fue cuando los recitaba para refugiarse y dejaba los demás refugios; ya que incluyen todos los refugios necesarios para protegerse de todo mal.

التصنيفات

Al-ruqya al-Shar’iah.