Que un judío vino a ver al Mensajero, Al-lah le bendiga y le dé paz, y le dijo: Oh, Muhammad, Al-lah sostiene los cielos con un dedo y las tierras con un dejo, sostiene las montañas con un dedo, los árboles con un dedo y las criaturas con un dedo. Después dice: Yo soy el Soberano.

Que un judío vino a ver al Mensajero, Al-lah le bendiga y le dé paz, y le dijo: Oh, Muhammad, Al-lah sostiene los cielos con un dedo y las tierras con un dejo, sostiene las montañas con un dedo, los árboles con un dedo y las criaturas con un dedo. Después dice: Yo soy el Soberano.

De Abdallah Ibn Mas'ud, que Al-lah esté complacido con él, quien relató que un judío vino a ver al Mensajero, Al-lah le bendiga y le dé paz, y le dijo: Oh, Muhammad, Al-lah sostiene los cielos con un dedo y las tierras con un dedo, sostiene las montañas con un dedo, los árboles con un dedo y las criaturas con un dedo. Después dice: Yo soy el Soberano. “Rió el Mensajero de Al-lah, Él le bendiga y le dé paz hasta que se le vieron las muelas traseras”, y recitó después: “Y no han valorado a Dios en su verdadera magnitud...” [Corán, 39:67].

[Hadiz auténtico (sahih)] [Registrado por Al-Bujari y Muslim]

الشرح

Este hadiz demuestra la grandeza de Al-lah Todopoderoso, ya que pone todos los cielos sobre un dedo de su mano digna y grandiosa. También enumera todas las obras de la creación distinguidas por su grandeza y magnitud, e informa de que cada una de ellas se asienta sobre uno de los dedos del Todopoderoso. Si Al-lah Excelso quisiera, podría poner los cielos, las tierras y cuanto hay en ellos sobre un solo dedo de su mano, Majestuoso y Excelso. Esto forma parte de la sabiduría heredada por los profetas, a los que fue transmitida a través de la Revelación procedente de Al-lah Todopoderoso. Por ello, el Mensajero, Al-lah le bendiga y le dé paz, dio credibilidad a las palabras del judío, de hecho le llamó positivamente la atención y le agradó. Por eso rió hasta que se le vieron las muelas traseras, en señal de asentimiento, como dijo Abdallah Ibn Masud en otro relato: y recitó después: “Y no tienen una comprensión acertada de Al-lah, cuando en el Día de la Resurrección la tierra toda sea para Él un puñado, y los cielos estarán enrollados en Su mano derecha: ¡infinito es Él en Su gloria, y excelso sobre todo aquello a lo que atribuyan parte en Su divinidad!” [Corán, 39:67]. En esta aleya encontramos la prueba de las manos de Al-lah, lo que certifica y reafirma las palabras del judío. No conviene prestar atención a quienes pretenden sembrara la duda, negando que Al-lah tenga dedos, ya que creen que eso Lo asemejaría a sus criaturas. Lo que no sabe esa persona que quiere sembrar la duda es que la posesión de esa cualidad por parte de Al-lah no significa que sea similar a sus criaturas. De hecho hay pruebas de que Al-lah tiene vida, poder, fuerza, oído y vista, pero ello no significa una comparación con sus criaturas, ya que Él, Todopoderoso, “nada hay que se asemeje a Él, y sólo Él todo lo oye, todo lo ve” [Corán, 42:11].

التصنيفات

La Unicidad de los Nombres y Atributos de Al-lah.