إعدادات العرض
1- "Mensajero de Al-lah, ¿Acaso puede uno de nosotros dormir estando en estado de impureza después de mantener relaciones conyugales?" Le contestó: "Efectivamente, una vez que haga la ablución puede irse a dormir".
2- Si uno de ustedes realiza la ablución menor que aspire agua por su nariz y luego la eche; si alguno se higieniza después de las necesidades fisiológicas usando piedras, que utilice un número impar; y al despertarse del sueño, que lave sus manos tres veces antes de introducirlas en el recipiente de agua, puesto que ninguno de ustedes sabe qué partes ha tocado su mano mientras dormía.
3- ¡No dejéis el fuego encendido en vuestras casas mientras dormís!
4- Que el profeta —que la paz y las bendiciones de Al-láh sean con él—, al ir a la cama cada noche, solía juntar ambas manos, luego soplarlas y recitar en ellas las siguientes suras {Di, Él es Al-láh, la única divinidad}, {Di: me refugio en el Señor del rayar del alba} y {Di: me refugio en el Señor de los humanos}
5- Le dijo: Di: ‘Al-lahumma fátiris samáwáti wal ard, Álimil gaibi wa-shaháda; Rabba kulli shaiin wa malíkahu. Ashhadu an la ilaha illa Anta. Aúdhu bika min sharri nafsí wa sharri ashaitáni wa shirkihi’ (¡Oh Al-lah, Creador de los cielos y de la Tierra; conocedor de lo invisible y de lo visible; Señor y Amo de todas las cosas; atestiguo que no hay más dios que Tú; me refugio en Ti del mal que hay en mi alma y del mal de Satán y su incitación a la idolatría y a asociar otros a Al-lah!).
6- Ciertamente ese fuego es su enemigo. Así pues, cuando vayan a dormir, apaguen el fuego.
7- Que el Mensajero de Al-lah, Él le bendiga y le dé paz, cuando se disponía a dormir, solía colocar su mano derecha debajo de la mejilla y después decir: “Allahumma qiní adhábika yauma tabazu ibádika” (¡Oh Allah, protégeme de Tu castigo el Día que resucites a Tus siervos!)